
Javier Milei quebró este miércoles al radicalismo, antes que cayera por falta de quórum la sesión convocada por el bloque de Miguel Pichetto para tratar una nueva fórmula jubilatoria. Si bien faltaron 10 diputados para que hubiese 129 sentados a sus bancas y arrancara el debate, el Presidente logró que la UCR se subordinara a su plan para seguir licuando los haberes previsionales con la inflación hasta que se apruebe un nuevo cálculo.
La jugada que diseñó la Casa Rosada para ese objetivo fue la promesa de conformar la Comisión de Previsión y Seguridad Social para el mismo día que la sesión. Así disuadió de ingresar al recinto a 29 de los 34 legisladores radicales que integran el bloque en la Cámara Baja. Solamente 5 se sentaron a sus bancas, un puñado de los que responden a Facundo Manes.
Desde el entorno de Rodrigo De Loredo, presidente de la bancada, admitieron que el tema se discutió en la reunió de bloque del lunes. «Se habló de no dar quórum pero alguno expresó disenso. Fue una minoría obviamente, que son los pocos que se sentaron», dijeron.
Cerca del neurocirujano retrucaron: «si no bajás, no te interesa lo que se está discutiendo».
La afirmación no es solo una chicana. Un diputado macrista conjeturó que Milei no va a presentar o aplicar su fórmula jubilatoria hasta mitad de año: «va a ajustar a los jubilados, con la inflación».
Asimismo, reconoció que también es un tema caro para el PRO. «Para nosotros es difícil no dar quórum porque parte de nuestro electorado está entre los jubilados», argumentó. Sin embargo, los 37 legisladores del PRO se plegaron a la estrategia del oficialismo y no dieron quórum.