Lapadula advirtió sobre los riesgos del proyecto de salmonicultura del gobierno
El legislador Matías Lapadula marcó diferencias con el proyecto del gobierno sobre salmonicultura, que obtuvo dictamen en una reunión de comisión que terminó en escándalo, con la renuncia de su presidente. Todas las zonas quedarían habilitadas para una explotación intensiva, salvo el Canal de Beagle, y no se trata de emprendimientos que generen mano de obra importante, según dijo. Podrían llevarse adelante en menor escala, con productores locales, dentro del marco de la soberanía alimentaria que defiende el Municipio de Río Grande. También se refirió a la conformación del frente Defendamos Tierra del Fuego, que se basa en una propuesta que tiene hechos para demostrar.
Río Grande.- El legislador de Provincia Grande Matías Lapadula fue consultado en el programa ‘Buscando el Equilibrio’ por Radio Provincia sobre el dictamen del Ejecutivo con el voto de cuatro legisladores, para modificar la ley 1.355 que prohibió la salmonicultura.
Fue suscripto en el marco de una reunión de comisión que terminó con la renuncia de su presidente, Laura Colazo, luego de un cuarto intermedio que había dado por finalizado el debate, pero fue retomado con posterioridad cuando varios legisladores se habían retirado.
“Fue una reunión conjunta de las comisiones 1 y 3 y fue convocada de manera repentina, el día anterior. Había tres proyectos vinculados con la modificación de la ley 1355, dos eran de La Libertad Avanza y había un proyecto que giró el Ejecutivo. Hubo gente que se acercó de organizaciones ambientalistas y vecinos de Río Grande, a decir lo que pensaban. Yo puse palabra respecto de lo que pensaba, se llamó a un cuarto intermedio, cuando ya me había retirado se levantó ese cuarto intermedio y se sacó el dictamen con la firma de cuatro legisladores”, relató.
“Hay que ver cuál era el quórum en ese momento, porque tiene que haber quórum de la comisión para sacar dictamen. Yo no estaba y no pude constatar quiénes eran los legisladores presentes”, indicó.
“Desde Provincia Grande nos oponemos al proyecto que envió el Ejecutivo. Nosotros estamos convencidos de la necesidad de desarrollar la acuicultura, pero no de esta manera. Tiene que ser de una manera sostenible y hay muchas cosas en el proyecto con las que no coincidimos, porque está enfocado a permitir grandes inversiones en salmonicultura a escala. Nosotros siempre planteamos este desarrollo desde la soberanía alimentaria, con pequeños productores que puedan desarrollar esta actividad, para que podamos tener acceso a alimentos frescos”, explicó.
“Siempre se tiene que buscar un impacto positivo en la sociedad y, si bien es importante que haya inversiones, lo más importante es ver el impacto. En este caso son pocos puestos de trabajo y está previsto un impacto ambiental importantísimo. Eso no es negociable. Yo sigo sin entender por qué la ley prohíbe la salmonicultura en el Canal de Beagle solamente y eso quiere decir que la costa atlántica está habilitada, pero el Canal Beagle llega hasta cabo San Pío, que está enfrente de la isla Nueva. Desde ese lugar hasta Península Mitre ya no es más Canal de Beagle, entonces técnicamente Bahía Aguirre y Bahía Thetis estarían habilitadas, cuando son zonas protegidas. Son grises que no podemos dejar, porque pueden venir inversiones sumamente dañinas para el medio ambiente”, advirtió.
Destacó el proyecto que presentó Sulko Romero, que “no es un proyecto a escala, sino de menor envergadura, y tiene que ver con la tecnología RAS, que es la circulación de agua fuera de los espejos de agua y del mar. Yo estoy de acuerdo con esta metodología, pero hay que controlarla. El proyecto que tiene dictamen no dice esto, solamente que se prohíbe en aguas del Canal de Beagle. Eso es lo que me alarma, porque el daño que provoca esta explotación es importante y tenemos que ser mucho más precisos en la ley. Así como está el dictamen, no me da ninguna garantía”, sostuvo.
Consideró que “se pueden hacer programas serios de pequeños productores, por ejemplo con la trucha, que no genera mayores problemas ambientales y tiene un mercado importantísimo. No veo por qué promover una industria salmonera que tiene impactos negativos, con un impacto social y económico escaso, porque hablamos de 150 empleos directos”, estimó.
“Nosotros hemos ayudado a 400 productores, algunos de los cuales tienen empleados. Con muy poco se puede generar trabajo y que el impacto económico y social sea mayor”, afirmó.
Sin puerto logístico
Por otra parte, por decisión del gobierno, los fondos que tenía en reserva la Dirección de Puertos, fueron a parar la obra social y no habrá fondos para el área logística que estaba prevista en la zona norte. Para Lapadula esto es solamente una excusa. “La ley de financiamiento de la OSEF dispone las utilidades del Puerto para atender las deudas y entiendo que era necesario, más allá de la necesidad de realizar esta obra en Río Grande. Pero esto es poner una excusa, porque hace seis años que gobiernan y no se ha avanzado en ninguna de las obras prometidas. Mucho más importante es avanzar con la obra del puerto, que fue anunciada y no hemos visto nada. Se hacen un montón de anuncios desde hace mucho tiempo, pero queda todo en eso. Ahora viene perfecta la excusa, pero hay que empezar a pensar por qué en seis años de gobierno no se ha hecho nada”, planteó.
“El gobierno tiene que dar muchas explicaciones de lo que está haciendo con el Laboratorio del Fin del Mundo, que es una empresa del Estado provincial, porque hasta ahora no hemos visto nada. Hay pedidos de informe desde la Legislatura, porque tenemos una empresa que no cumple con su función y lo único que genera es gasto. Me parece que lo más saludable sería que deje de funcionar, hasta que tenga un plan concreto. No podemos tener organismos del Estado que sean deficitarios y que requieran de dinero todos los meses, cuando no hay plata. Hay dificultades en todas las áreas, en salud, en la OSEF, en las escuelas, con los salarios, y no se puede seguir dilapidando dinero, no solamente en esta empresa sino en otras áreas de gobierno sobredimensionadas con personal”, dijo.
Frente Defendamos Tierra del Fuego
Con respecto a la conformación del frente, manifestó que “era necesario tener una postura clara desde Provincia Grande, de lo que representa Martín Përez y qué queremos como provincia. Tenemos una mirada totalmente opositora al gobierno de Javier Milei, porque las decisiones que se están tomando van a llevar a otro colapso de la economía argentina. Con estas políticas económicas los únicos que ganan plata es el sector financiero”, cuestionó.
“Nosotros tenemos una propuesta que tiene que ver con lo que uno puede mostrar. Este modelo para Tierra del Fuego no son palabras nada más sino que está en los hechos, en la manera de gestionar, de planificar, con una gestión ordenada. Necesitamos un Estado eficiente, no la ausencia del Estado que promueve el gobierno nacional. El Estado tiene que llevar soluciones a los vecinos y eso representa Provincia Grande y la gestión de Martín Pérez”, definió.
“Tenemos una política de salud modelo a nivel nacional, llevada a cabo por un municipio. Se atiende a todos los vecinos en un momento en que hay problemas en la salud provincial. Hay que mostrar estas cosas y dejar de tener una propuesta desde lo negativo”, expresó.
A diferencia del frente de Vuoto y Melella, dijo que “no podemos hacer alianzas forzadas por necesidad o por lo que sea. Hace tres semanas estaba absolutamente rota la alianza entre el PJ y FORJA y de repente sale esta alianza forzada, que llaman unidad, pero la verdad es que no hay un diálogo y gran parte de los partidos que conforman la alianza a nivel nacional están dentro de Defendamos Tierra del Fuego. No es tan así la unidad que pregonan”, aseveró.
“Nosotros queremos tener legisladores nacionales que traigan soluciones a la provincia y del otro lado es otra cosa. Hoy tenemos un proyecto en la Legislatura promovido por el PJ, FORJA y por La Libertad Avanza, cuando están en contra del gobierno nacional. Pasó en el Concejo Deliberante de Ushuaia cuando se aprobó el RIGI. Parece que son oposición al gobierno nacional pero otras veces avanzan en los proyectos que el gobierno nacional exige”, observó.
Terra Ignis
Finalmente expuso sus interrogantes con respecto al rol de Terra Ignis. “Lo que está sucediendo con la actividad hidrocarburífera en Tierra del Fuego es muy preocupante. Las empresas empiezan a abandonar las áreas porque se van asentando en Vaca Muerta y es un problema. Tenemos que pensar en una solución a mediano y largo plazo para que esto no siga sucediendo”, instó.
“Veo con preocupación la retirada de YPF y qué va a hacer Terra Ignis con respecto a eso. Yo no creo que esté en condiciones de continuar con las operaciones y también hay que ponerse firmes en el caso de YPF con lo que es el pasivo ambiental. Tiene que hacerse cargo la empresa y por ahí tiene que pasar la negociación. Sé que hay un plan de negocios y me preocupa que todas estas cuestiones terminen solamente costando dinero al Estado y que no pase nada, como la gran mayoría de los anuncios que se fueron haciendo desde hace cinco o seis años. Algo hay que concretar, el puerto, el proyecto de hidrógeno verde y muchas cosas que quedaron solamente en anuncios. Son casi seis años de gestión y nada de esto ha pasado. No se ha mejorado ninguna situación en la provincia”, concluyó